El ejercicio tiene como fin acercarse el máximo posible a la realidad de un trabajo profesional de interiorismo y decoración, no podrá afectar a 
elementos estructurales resistentes. 
El ejercicio no afectará a la configuración de la edificación, considerándose como tal todas las características arquitectónicas externas de índole 
volumétrica, formal o estilística. 
Interiormente se podrá actuar 
libremente siempre que no afecte a la estructura.
La práctica incluye una serie de piezas 
que pertenecen a nuestra cliente y que se tendrán que usar en el proyecto de manera obligatoria organizando el espacio entorno a ellas, y no alrevés.